Al menos hasta el 31 de octubre, y desde el 23 de abril. Es decir, que el “patinazo” parlamentario de hace unos días lo han solucionado mediante el Decreto-ley 28/2020, de 22 de septiembre.

Volvemos a asistir a un alarde de técnica legislativa, ya que el citado Decreto Ley es el que regulará el teletrabajo, pero bueno, bien está lo que bien acaba.